La vida colectiva a través de un sistema de cuidados ha sido una de las maneras en que las mujeres trabajadoras hemos resistido y sobrevivido a la violencia machista, como también desde donde hemos creado comunidad, territorios. Es así como los cuidados entre mujeres, la rabia creativa, el estudio y la exploración sobre el cuerpo femenino y la salud sexual y reproductiva, son nuestras formas de re-existencia.

Para nosotras el derecho a una salud sexual y reproductiva, a decidir sobre nuestros cuerpos, a vivir nuestros cuerpos con placer, libres de maltratos y de prejuicios, a tener un aborto seguro, es una forma de lucha contra múltiples violencias y nuestra apuesta en la construcción de un mundo justo y bello para las mujeres.

Por esto Declaramos:

• Nuestro amor, compromiso y lealtad con las mujeres que en su vida cotidiana luchan por un mundo mejor.
• Nuestro acompañamiento en su decisión de abortar por las razones que sean.
• En alerta permanente contra el embarazo forzado de niñas y adolescentes.
• En constante producción del conocimiento y su liberación, que no esté solo en manos de la ciencia privatizada ni de la medicina mercantilizada sino en las manos de quienes cuidan.
• Nos comprometemos a contar la historia de las mujeres, desde las mujeres.
• En compartir las cifras, los datos y el análisis feminista de estos para que sean de uso público-popular y así avanzar en la construcción de políticas desde el poder popular.
• En defensa de las mujeres que son denunciadas por abortar.
• En exigencia a organismos competentes por la justicia reproductiva.
• En luchar día a día hasta lograr la despenalización social y legal del aborto para que en Venezuela las mujeres tengamos derecho a un aborto libre, seguro, acompañado y popular.