Mifepristona: es un antiprogestágeno. Bloquea la producción de progesterona, que es la hormona indispensable para que continúe un embarazo.

Misoprostol: es una hormona que produce contracciones uterinas provocando el aborto.

Esta combinación de medicamentos (mifepristona + misoprostol) permite a las mujeres realizarse un aborto seguro autogestionado hasta las 12 semanas de gestación. Según la Organización Mundial de la Salud (OMS) el aborto con medicación combinada (mifepristona + misoprostol) tiene una eficacia de hasta un 98%. Están en la lista de medicamentos esenciales de la OMS.

Si tienes algún dispositivo intrauterino DIU, deberás retirarlo antes, lo cual de por sí lleva un riesgo de aborto.

No podrás hacerlo si tuviste una cesárea hace menos de 6 meses.

Si tienes anemia severa, debes tener cuidados adicionales debido al sangrado abundante que se ocasiona con el aborto.

Si eres factor RH (-) en sangre se puede colocar la vacuna gammaglobulina anti D en caso de que el progenitor sea RH (+), porque hay la posibilidad de que el feto sea RH (+), y al momento del aborto puede haber contacto entre tu sangre y la del feto, crear anticuerpos con posibles consecuencias para un segundo embarazo, si entre tus planes está en un futuro quedar embarazada. Esto se hace en un lapso corto de tiempo después del aborto. Si no, pues no hay necesidad de conseguir esta vacuna.

Paso 1.- Tomar con agua una pastilla de mifepristona.

Paso 2.- Al pasar 24 horas después de tomar la mifepristona, poner 4 pastillas de misoprostol entre la encía y la mejilla, deja que se disuelvan durante 30 minutos. Pasado este tiempo tomas un buche de agua y tragas los residuos.

Paso 3.- Si el sangrado no comienza en las 3 horas siguientes, se recomienda repetir el procedimiento con dos comprimidos de misoprostol, juntos, entre la encía y la mejilla. Esperar nuevamente media hora.

El aborto con medicamentos puede durar por lo menos 6 horas con la expulsión de coágulos, de 1 a 2 días con cólicos, y con manchas o hemorragias continuas durante 10 a 45 días.

En cada mujer suelen presentarse diferentes síntomas entre los más comunes tenemos:

• Dolor asociado a cólicos uterinos que pueden ir de menos a más.
• Sangrado abundante con presencia de coágulos
• Náuseas
• Diarrea
• Dolor de cabeza
• Mareos
• Fiebre

La fiebre causada por el misoprostol comienza justo después de su colocación y generalmente es leve.

Para calmar el dolor puedes tomar ibuprofeno o paracetamol. La aspirina no es recomendable porque aumenta el sangrado por efecto de su función anticoagulante.

También puedes tomar algún medicamento para prevenir las náuseas media hora antes de ingerir misoprostol.

Puedes prepararte para estar lo más cómoda posible, preferiblemente acompañada. Ten a mano toallas sanitarias porque tendrás abundante sangrado que irá disminuyendo.

Utilizar una compresa para darte calor o hacerte masajes en las zonas con dolor no afectará el aborto y puede ayudarte a sobrellevar el proceso. Igualmente puedes ingerir infusiones y alimentos que no dificulten la digestión. Ten en cuenta que podrás sentir ansiedad cuando no se ha iniciado el sangrado, alarmarte con los cólicos uterinos intensos y observes coágulos en el sangrado. También puede ser que sientas intranquilidad acerca del resultado del aborto, y para esto te recomendamos que preguntes a la acompañante de Entre nosotras.

Si quieres aumentar tu sensación de control puedes hacer anotaciones sobre todo el proceso, número de toallas sanitarias usadas, sensaciones, pensamientos, alimentos y bebidas que tomes, o pedirle a tu acompañante que lo haga.

La mayoría de mujeres se dan cuenta si el aborto ha sido exitoso poco tiempo después de usar el medicamento, porque sienten que los síntomas de embarazo desaparecen rápidamente. También porque las mujeres ven el saco gestacional entre los productos del aborto.

Y aunque la mujer sienta que ya no está embarazada, es importante que se asegure de que el aborto fue exitoso, puede ser a través de una ecografía 10 días después del aborto o una prueba de embarazo (de orina) 3-4 semanas después del aborto.

Cualquier fiebre alta y persistente que no ceda con ningún tratamiento y ocurra los días posteriores a la expulsión es motivo para ir a emergencia cuanto antes. Se te atenderá como un aborto espontáneo incompleto.